domingo, 25 de noviembre de 2012

Habitación anecoica: la mente no resiste al silencio

Todos lo anhelan, pero, ¿se puede soportar el silencio? 45 minutos fue el mayor tiempo que alguien ha podido soportar dentro del lugar más silencioso del mundo.

El Laboratorio Orfield creó la 'cámara anecoica', en los EE.UU., con un 99,99% de insonorización.
Tras un corto tiempo, los voluntarios tuvieron alucinaciones.
Dicen que el silencio es oro –pero hay una habitación en los EE.UU. que es tan silenciosa, que al poco tiempo se vuelve insoportable.
El plazo más extenso que una persona ha sobrevivido en la 'cámara anecoica' en los laboratorios de Orfield, en el sur de Minneapolis, es apenas de 45 minutos. Esta cámara está diseñada con un 99,99 por ciento de sonido absorbente, y tiene el récord mundial Guinness del lugar más tranquilo del mundo, pero quienes permanecen allí por mucho tiempo pueden empezar a alucinar.
Su ultra-silencio se logra gracias a los de 3,3 metros de espesor de las cuñas acústicas de fibra de vidrio, y las paredes dobles de acero y hormigón de un metro de espesor.
El fundador de la compañía y presidente, Steven Orfield, dijo a MailOnline: “Retamos a la gente a sentarse en la cámara en la oscuridad –un reportero se quedó allí durante 45 minutos.”
“Cuando hay silencio, los oídos se adaptan. A mayor silencio en la habitación, más son las cosas que se oyen. Uno comienza a escuchar los latidos de su corazón, a veces incluso se pueden escuchar los pulmones, o ruidos del estómago, con bastante intensidad”.
“En la cámara anecoica, uno se convierte en el sonido.”
Y es esta una experiencia muy desconcertante. El Sr. Orfield explicó que es tan desconcertante que sentarse se vuelve una necesidad.
Indicó: “Uno se orienta a través de los sonidos que oye cuando camina. En la cámara anecoica, no hay ninguna pista. Se quitan las señales perceptivas que permiten el equilibrio y la maniobra. Si se está allí durante media hora, se está en sentado en una silla.”
La cámara se utiliza por una buena cantidad de fabricantes para probar cuán fuertes suenan sus productos.
El Sr. Orfield agregó: “La cámara se emplea para pruebas formales de los productos, para la investigar los sonidos de las diferentes cosas –válvulas del corazón, el sonido de la pantalla de un teléfono celular, el sonido de un interruptor de un automóvil.”
También se ha puesto en uso para determinar la calidad del sonido.
El Sr. Orfield y su equipo ayudan a compañías tales como Whirlpool, fabricantes de lavadoras, para desarrollar metáforas de cómo deberían sonar. Los fabricantes de Harley-Davidson emplean el laboratorio, por ejemplo, para hacer que sus productos produzcan ruidos más tranquilos, sin que por eso dejen de sonar como Harley-Davidson.
“Nosotros grabamos los productos y la gente los escucha sobre la base de los términos semánticos, como "caro", "baja calidad"”, comentó el Sr. Orfield. “Medimos sus sentimientos y las asociaciones que surjan.”
La NASA, por su parte, utiliza una cámara similar para poner a prueba a sus astronautas.
Se los coloca en un tanque lleno de agua dentro de la sala para ver “cuánto tiempo se demora antes de que las alucinaciones tengan lugar, y cómo pueden trabajar en esos términos.”
Como el Sr. Orfield explica, el espacio es como una cámara anecoica gigante, por lo cual resulta crucial que los astronautas sean capaces de mantener la concentración.
El Sr. Orfield admite que puede durar unos muy respetables 30 minutos en su habitación, a pesar de tener una válvula mecánica en su corazón, que se vuelve muy audible una vez que ingresa allí.

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